El concepto de inteligencias múltiples fue definido por el profesor Howard Gardner.
Usar las inteligencias múltiples en educación infantil es especialmente útil cuando nos referimos a los niños en las primeras etapas de desarrollo. Todos aprenden de manera diferente, y los maestros necesitan apoyar estos estilos de aprendizaje únicos si quieren asegurar el éxito de los niños.
Existen tres principales razones para usar las inteligencias múltiples/estilos de aprendizaje en la educación infantil:
- Usar inteligencias múltiples en educación infantil ayuda a todos los niños a tener éxito. Siempre es necesario recordar que solo porque un docente es de lingüística verbal, no significa que sus alumnos sí lo sean. Algunos niños NO aprenderán mejor escuchando una charla de un maestro, respondiendo preguntas en un papel o participando en una discusión. Sin embargo, estos infantes pueden prosperar en un ambiente práctico.
- Usar inteligencias múltiples en educación infantil en muchos casos, eliminará los problemas de administración del aula. ¿Cuándo los niños se convierten en un problema de conducta? Por lo general, es cuando están aburridos o sienten que no tienen ninguna esperanza de completar una tarea. Si puede incorporar más de un tipo de inteligencia en su enseñanza, es probable que los alumnos se entusiasmen con la tarea.
- Usar inteligencias múltiples en educación infantil ayuda a los peques a desarrollar aún más todas las inteligencias. La investigación muestra que todos los estudiantes poseen todas las inteligencias hasta cierto punto.
También es muy importante que los maestros fomenten la metacognición. Se debe alentar a los estudiantes a pensar acerca de cómo aprenden. Les beneficia cuando conocen los estilos de aprendizaje y cómo aprenden mejor. A medida que los niños aumentan su metacognición, son más capaces de asumir la responsabilidad de su aprendizaje, ¡lo cual es algo muy bueno!
La Importancia De Satisfacer Las Necesidades De Un Niño
Apoyar a los niños tanto conductualmente como académicamente comienza con la satisfacción de sus necesidades. Al desarrollar lecciones que se basan en una variedad de inteligencias diferentes, los maestros pueden esperar satisfacer mejor las necesidades de muchos más estudiantes que a través de un solo método. Piense en esto: si le pidieran que hiciera una tarea que fuera interesante y que tuviera confianza que podría completar con éxito, ¿cómo podría abordarla? ¿Qué tipo de actitud esperas tener hacia la tarea? Probablemente te sientas muy bien acerca de cómo empezar y lo más probable es que puedas trabajar hasta completarlo sin incidentes. Ahora, piensa en que te pidan que hagas una tarea que tenías pocas esperanzas de completar, dadas tus habilidades y talentos. ¿Lo abordarías con el mismo entusiasmo? ¿Sería capaz de seguir con la tarea sin distracciones? La mayoría de las personas responderían estas preguntas, «probablemente no». Piense en cuántos estudiantes se enfrentan diariamente con el segundo escenario. Debe ser muy frustrante y probablemente sea la causa de muchos de los problemas de conducta que vemos en las escuelas.
Por supuesto, no es realista pensar que cada maestro puede individualizar cada lección para cada niño. En una clase típica, habrá varios niños que demuestren fortalezas en cada una de las áreas de inteligencia, por lo que permitir que estos trabajen en grupos de aprendizaje cooperativo, ya sea mezclando diferentes tipos de inteligencia o agrupándolos, dependiendo de las asignaciones, puede ser una estrategia exitosa para maestros. Otra opción podría ser ofrecer de dos a cinco opciones de actividades que los niños puedan hacer para demostrar su dominio del contenido. Esto les permitiría a los maestros tener menos tiempo para la preparación y asignación de calificaciones, pero aún les permitiría a los niños abordar su trabajo utilizando sus habilidades naturales. Finalmente, los profesores pueden desarrollar lecciones que incorporen varias estrategias diferentes, lo que les permite a los infantes obtener cierta comodidad con el trabajo en las diferentes etapas de la actividad de la clase. La mayoría de las personas tienen fortalezas en varias áreas diferentes de inteligencia, por lo que podrán sentirse exitosos utilizando una variedad de estrategias. Si bien pensar en diferenciar las lecciones de estas maneras puede parecer un trabajo adicional para los maestros, la alternativa puede causar más trabajo a lo largo del tiempo. Al permitir que los alumnos muestren con éxito lo que saben, los profesores pueden evitar interrupciones en el aula y minimizar la repetición de la enseñanza, creando un entorno de clase más productivo para todos.
Las Implicaciones De Las Inteligencias Múltiples en educación infantil
La aceptación de la teoría de las inteligencias múltiples tiene varias implicaciones para los maestros en términos de instrucción en el aula. Se establece que las siete inteligencias son necesarias para funcionar productivamente en la sociedad. Los maestros, por lo tanto, deberían pensar que todas las inteligencias son igualmente importantes. Esto está en gran contraste con los sistemas educativos tradicionales que típicamente ponen un fuerte énfasis en el desarrollo y uso de las inteligencias verbales y matemáticas. Por lo tanto, la Teoría de las Inteligencias Múltiples implica que los educadores deben reconocer y enseñar a una gama más amplia de talentos y habilidades.
Otra implicación es que los maestros deben estructurar la presentación del material en un estilo que involucre a la mayoría o a todas las inteligencias. Este tipo de presentación no solo entusiasma a los estudiantes sobre el aprendizaje, sino que también permite que un maestro refuerce el mismo material en una variedad de formas. Al activar una amplia variedad de inteligencias, la enseñanza de esta manera puede facilitar una comprensión más profunda del material de la asignatura.
Todos nacen poseyendo las siete inteligencias. Sin embargo, todos los estudiantes vendrán al salón de clases con diferentes conjuntos de inteligencias desarrolladas. Esto significa que cada niño tendrá su propio conjunto único de fortalezas y debilidades intelectuales. Estos conjuntos determinan qué tan fácil (o difícil) es para un estudiante aprender información cuando se presenta de una manera particular. Esto se conoce comúnmente como un estilo de aprendizaje. Muchos estilos de aprendizaje se pueden encontrar dentro de un aula. Por lo tanto, es imposible, así como poco práctico, que un maestro acomode cada lección a todos los estilos de aprendizaje que se encuentran en el aula. Sin embargo, el profesor puede mostrar a los alumnos cómo utilizar sus inteligencias más desarrolladas para ayudar a comprender un tema que normalmente emplea sus inteligencias más débiles.
En próximas entradas seguiremos hablando sobre inteligencias múltiples. En el enlace siguiente puedes visitar una parte de nuestra web en la que hablamos de inteligencia emocional.
